Déjanos tu comentario
En los vehículos a motor podemos encontrar componentes que requieren de una importancia mayor y que son absolutamente imprescindibles para hacer que el coche se desplace.
Si bien muchos de estos componentes son bastante comunes para cualquier conductor, sea o no un entendido de los coches o la mecánica, como puede ser una rueda o un amortiguador, por ejemplo, hay otros que pueden pasar más desapercibidos pero que son igual de importantes.
Y entre estas piezas esenciales y algo más desconocidas que hacen que el coche se mueva podemos encontrar las bobinas de encendido. Un componente propio y fundamental en los coches que funcionan con gasolina.
¿En qué consiste una bobina?
Para explicar qué es una bobina tenemos que partir de la base de cómo funciona un motor térmico. Pues bien, para que el motor se mueva necesitamos una chispa que haga que la gasolina y el aire exploten en la cámara de combustión. Y esta chispa la produce la bujía.
Pero, como es lógico, la bujía no puede funcionar por sí misma y producir de la nada esa chispa. Por tanto, es la bobina la que suministra la electricidad suficiente a la bujía para que se provoque una descarga potente en sus electrodos y produzca la chispa que hará que comience la combustión.
Las bobinas rompen y así podemos notarlo
Como todo elemento de desgaste de un coche, la bobina también tiene un ciclo de vida y hay que ir al taller a sustituirla en un momento determinado. Su avería se provoca por el propio uso cuando por un exceso de resistencia se produce un pico de tensión que al cortocircuitar la funde.
Sin embargo, también puede romperse por otras causas ajenas a ella, como que el vehículo se sobrecaliente o que se produzca una filtración de un líquido haciendo que se moje y corroborando que la electricidad y la humedad no se llevan bien.
Sin embargo, si una bobina falla será bastante fácil de saber, porque notaremos de inmediato que estamos circulando con un cilindro menos. Algo que debemos solventar en nuestro taller cuanto antes, porque estaremos forzando nuestro motor y puede desencadenar en mayores averías.
Entre los síntomas que se pueden notar si falla una bobina encontraremos
Es probable que también se nos encienda un testigo de avería como el MIL o que, si nuestro coche es muy moderno el panel de instrumentos nos diga que la bobina está fallando.